Nunca es fácil adaptarse a la categoría Preferente para un recién ascendido, máxime si no ha reforzado su plantel con algún fichaje rutilante, como fue el caso de Sociedad La Montaña, que afrontó el reto con los mismos jugadores que lograron el ascenso. Por si esto fuera poco, el destino le tenía preparada una jugada cruel al entusiasta y caballeroso club del norte: en las dos primeras rondas debía enfrentarse al campeón de Canarias y al campeón de liga de la pasada temporada.
El comienzo de la competición sumió a Sociedad La Montaña en el fondo de la clasificación, de tal modo que en ningún momento, y a pesar de sus esfuerzos, llegó a ocupar posiciones de permanencia. Competir en tales circunstancias puede llegar a ser sumamente desagradable, pues las urgencias clasificatorias ejercen una presión asfixiante, una presión que se prolongó a la espera de lo que pudiese hacer su segundo equipo en la fase de ascenso de Primera a Preferente. Consideramos, por lo tanto, que Under pressure, de Queen & David Bowie, simboliza el devenir del club galdense durante la temporada. Aprovechamos la ocasión para desearles un pronto regreso a la máxima categoría.
Tras el aterrador comienzo de liga y tras haber ocupado la última plaza tras la primera jornada, Sociedad La Montaña se mantuvo en el penúltimo puesto hasta la primera ronda de la segunda vuelta. Sin embargo, tanto por la diferencia de puntos con respecto a los puestos de permanencia como por la reacción de Piscolabis Oleaje, el equipo de Gáldar tuvo imposible la remontada.
Sociedad La Montaña alineó a 10 jugadores. Junto con otros dos equipos, fueron quienes más ajedrecistas pusieron en juego tras Fundación La Caja de Canarias. Su Elo medio solo fue superior al del equipo que le acompañó en el descenso.
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| Cuadro 1 |
En la primera vuelta fueron alineados 5 jugadores, que lograron 5'5 puntos. En la segunda vuelta fueron llamados a filas 9, que consiguieron mejorar tan solo levemente la actuación del primer tramo liguero.
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| Cuadro 2 |
Perdieron un total de 36 partidas de las 56 disputadas, repartidas a partes iguales entre las dos vueltas. El balance de victorias en la primera mitad fue realmente desalentador -una-, mientras que en la segunda lograron cinco.
El primer tablero fue defendido en la primera manga por un solo jugador. En la segunda vuelta se incorporaría uno más a la tarea. La dificultad de su defensa se observa en sus registros, que nos indican que no logró victoria alguna.
Los tableros dos y cuatro son los que aportaron una mayor renta, con una contabilidad idéntica en el cómputo global.
Los tableros uno y tres conquistaron la misma cantidad de puntos, pero lo cierto es que el primero logró puntuar en más encuentros que el tercero, que fue quien más derrotas acumuló.
La alineación compuesta por Raúl Sánchez, Alexis Alonso, José Juan Díaz y Miguel Gutiérrez se enfundó las armas en 4 enfrentamientos, es decir, la misma cantidad de veces que la alineación más fuerte posible, que se corresponde con Raúl Sánchez, Alexis Alonso, Daniel Concepción y José Juan Díaz. Ambas formaciones lograron el mismo resultado: 2'5 puntos (16%), un porcentaje de puntos menor que el total conseguido (23%).
Actuación individual
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| Cuadro 3 |
Raúl Sánchez afrontó la ingrata tarea de defender el primer tablero en 12 de los 14 compromisos ligueros. Determinadas circunstancias dificultaron aún más un trabajo tan exigente, pero incluso así puntuó en 4 partidas -por el juego desplegado y las posiciones alcanzadas su recaudación pudo haber sido mayor- con lo que aportó 2 puntos a su equipo y permitió que no se debilitara el resto de tableros.
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| Cuadro 4 |
Alexis Alonso hubo de enfrentarse a adversarios temibles, pero en ningún momento se arrugó y consiguió puntuar cuando venían mal dadas, permitiendo que su equipo no saliera de vacío en enfrentamientos contra escuadras potentes. En el primer tablero consiguió mantener el tipo dignamente, mientras que en el segundo llegó a puntuar en la mitad de las partidas disputadas, si bien solo conseguiría vencer en una sola partida. Su aportación al ánimo de su equipo, aun siendo intangible, fue importante.
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| Cuadro 5 |
Daniel Concepción se entonó cuando la temporada estaba llegando a su fin. Fue en ese tramo del campeonato cuando logró las dos victorias que se observan en su registro.
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| Cuadro 6 |
José Juan Díaz repartió su actuación entre los dos últimos tableros, aunque principalmente ocupó el tercero. Su registro fue mejor en el cuarto, donde consiguió los mismos puntos que en el tercero, pero en menor cantidad de partidas.
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| Cuadro 7 |
Arístides Moreno solo intervino una vez. No logró puntuar en su debut en la categoría.
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| Cuadro 8 |
Más allá del porcentaje de puntos alcanzado, el hecho de que Miguel Gutiérrez lograra puntuar en tres de las cinco partidas que disputó supuso una buena inyección de ánimo y energía para su equipo.
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| Cuadro 9 |
Kevin Gutiérrez se vio en la misma casuística que su compañero Arístides, de tal modo que no consiguió puntuar en su debut en la categoría. Su única partida la jugó en el tercer tablero.
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| Cuadro 10 |
Carla Sosa debutó en la última jornada, y lo hizo con éxito. Partida jugada, victoria conseguida. Todavía en categoría infantil, Carla se halla en una fase prometedora de progreso, lo que nos alegra, pues siempre es excelente noticia que el ajedrez femenino gane protagonismo.
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| Cuadro 11 |
José Luis Macías tampoco pudo puntuar en su debut en Preferente, pero la experiencia, al igual que a sus compañeros, ahí le queda.
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| Cuadro 12 |
Néstor Sosa defendió el cuarto tablero en dos ocasiones. No logró puntuar, pero estamos seguros de que esas intervenciones han supuesto experiencias de valor para el joven jugador de la ciudad de los caballeros.
Pedro Gabino Padrón
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